También lo acusan de prostituirlas a cambio de dinero al entregarlas a “camioneros amigos”. La fiscalía de La Carlota aguarda que la resolución quede firme esta semana para elevar el caso a juicio
La denunciaLa denuncia fue presentada ante la Fiscalía hacia fines de enero y, ni bien se completó la investigación inicial con las pericias psicológicas y exámenes médicos, se ordenó la detención del hombre, quien fue capturado en la ciudad de Villa María donde estaba viviendo desde hacía pocas semanas.
El sospechoso -cuya identidad se preserva para no identificar a las víctimas- se encuentra alojado en la cárcel de Río Cuarto y esta semana la prisión preventiva quedaría firme si no media una apelación de su abogado defensor.
La fiscal Ana Venturuzzi confirmó que una de las chicas es mayor y la otra menor.
Fuentes vinculadas con la causa dijeron que las actuaciones se iniciaron en la localidad de Alejandro y que los hechos de abuso sexual y facilitación a la prostitución no sólo se producían en esa población sino que luego el hombre se trasladó a Reducción, donde los hechos continuaron sucediendo.
El hombre se separó de su esposa cuando vivía en Alejandro pero las hijas lo seguían visitando y se reiteraban los episodios.
Hace pocas semanas el sujeto se fue a trabajar a una emprersa láctea de la ciudad de Villa María, donde también se sucedieron los mismos hechos, todos los cuales fueron denunciados luego de que la madre confirmara de boca de sus propias hijas que el padre abusaba de ellas y las entregaba como prostitutas a camioneros.
«Estamos recabando todas las pruebas posibles para enviar la causa a juicio, entre ellas pericias psiquiatricas, psicológicas», señaló la fiscal de La Carlota.
Pruebas contundentes
«De cada testimonio se puede deducir un cúmulo de pruebas que le dan veracidad a los dichos de las víctimas. Además, en este caso, las víctimas son testigos entre sí», amplió Venturuzzi.
Las jóvenes, que eran menores al momento de los abusos, realizaron la denuncia junto a su madre -esta separada del progenitor-, contra su padre biológico.
Según fuentes de la causa, las violaciones comenzaron cuando tenían 13 años en momentos en que la mujer se ausentaba de la casa.
Los abusos continuaron luego de que se separó la pareja y el sujeto se trasladó a vivir a Reducción y, posteriormente, a la ciudad de Villa María.
Alertada por su cuñada
La hermana del detenido fue quien le advirtió a la madre de las víctimas de lo que estaba sucediendo, señalándole que no dejara que sus hijas estuvieran solas con el padre.
Las hijas iban a visitarlo y la ex mujer nunca sospechó lo que ocurría, señalando que aquéllas no le contaron antes por «estar amenazadas de muerte por el padre si hablaban».
“No puedo creer que mis hijas hayan sido violadas y obligadas a prostituirse por su padre. Destruyó a toda la familia”, aseguró la madre de las jóvenes, señaló la mujer en declaraciones a la agencia de noticias Télam.
La mujer que tiene otros cinco hijos dijo que fue alertada por la misma hermana de detenido, señalando que hasta fines de 2011, no había percibido nada anormal porque «el padre de mis hijas se comportaba de manera normal con las chicas».
Actualmente las jóvenes tienen 16 y 19 años. La más grande está embarazada y vive en pareja. “Mis hijas me contaron que a los 12 años las empezó a tocar y a los 13 las violó por primera vez”, relató la madre.
Además, por los dichos de sus hijas, el padre les exigía que mantuvieran relaciones sexuales con “unos camioneros amigos” a cambio de plata, y luego las obligaba a que les dieran el dinero, contó la humilde mujer.
Una familia humilde
“Se trata de una familia de condiciones humildes, que luego de que se fuera el hombre de la casa la mujer se enteró de lo que estaba sucediendo”, dijo una fuente consultada.
“Todo se inició hacia fines del mes de diciembre cuando recibimos la denuncia y ni bien se completaron las primeras pericias, con la prueba que se había recolectado se ordenó la detención de esta persona y el jueves se le dictó la prisión preventiva”, señaló la fiscal en diálogo mantenido ayer con PUNTAL.
La acusación es por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal calificado y agravado” y “promoción a la prostitución agravada y calificada”, con el aditamento que en ambas situaciones son dos de sus hijas las víctimas.
Una vez que el dictado de la prisión preventiva quede firme, el paso siguiente será completar los estudios y recolección de la prureba a los fines de que la causa sea elevada a juicio a los Tribunales de Río Cuarto.