El Legislador Provincial, Dr, Javier Pretto, refirió a FM Estrella sobre el proyecto de ampliación del nuevo ejido urbano. Coincidió, en algunos puntos, con las explicaciones de los arquitectos Ángel Moiso y Augusto Bravo y refutó en otros. En principio, Pretto, explicó que este proyecto no es repentino, sino que desde 1996 emergió como punto a trabajar en la gestión del ex intendente, profesor Alberto Abecasis.
Pretto comenzó diciendo: “La decisión de ampliar el radio es una decisión política. Esto que involucra a tanta gente y, sobre todo al crecimiento y al desarrollo de la ciudad, obviamente que se hace teniendo en cuenta los distintos actores de la ciudad. Según la Constitución, es una decisión conjunta. El Municipio decide que va a ampliar y tiene que tener en cuenta algunos parámetros que fija la Provincia a través de sus estamentos y, luego, necesita la ratificación legal por la Legislatura.
Es una decisión muy vieja, tiene como base la propuesta puesta por la gestión anterior a la mía como intendente. No es a la apuradas, ni repentina, ni inconsulta… Viene desde el año 1996. Se ha corregido varias veces el plano por la Dirección de Catastro. No es un tema que se le ocurrió al intendente: de someter a consideración de los concejales un plano… Ya viene desde el Gobierno de Abecasis, con buen criterio entiendo y, más allá de las correcciones de la Dirección de Catastro, en el fondo es una decisión política que está basada, en el fondo, en la historia y en lo que va a ocurrir en el futuro”.
Agregó: Escuchando a los arquitectos, escuché que uno de ellos dijo que el radio debía ser la resultante de la planificación. Desde el punto de vista de un planificador, obviamente que tiene que ser así, pero esto no es compartido por la Doctrina en forma unánime: es más, hay una cuestión de lógica antes, yo no puedo planificar lo que no es mío. Por más que uno quiera, el arquitecto por más especialista que sea no podría planificar el desarrollo de La Carlota en el territorio de la jurisdicción provincial o de la comunidad regional por ejemplo, por la simple razón de que no tiene jurisdicción sobre el lugar. Por eso, por una cuestión de lógica en el derecho, yo entiendo que primero hay que fijar el radio y, luego, planificar dentro del radio que planificamos. La decisión de fijar el radio es la decisión política del gobierno local, decidir en este ámbito geográfico. El Gobierno si reúne las condiciones que Catastro requiere, no discute eso. Tiene la opinión válida de Catastro. La Legislatura vota sin revisar el tema técnico porque respeta la decisión política del municipio, siempre que se cumplan los parámetros técnicos de Catastro.
Añadió: “Otra cuestión que dijo el arquitecto, y que no es del todo así, es que dentro del radio puede haber gente que necesite un servicio y el municipio tiene que servirlos o puede haber islas adonde tiene que servir. Nosotros tenemos como isla, planteado el tema del Parque Industrial que ya está teniendo servicios, pero en el caso de alguna otra entidad que esté fuera del radio y requiera el servicio, normalmente cuando se trata de una entidad pública, el gobierno siempre trata de proveer el servicio o hacerle una obra. Nosotros hemos hecho obras en las escuelas rurales que están fuera del radio, por ejemplo. Se plantea que el municipio está obligado a prestar servicios o construir obras. Éstas se hacen por construcción de mejoras y se hacen o por una decisión política de urbanizar un sector o a demanda del vecino y, luego, se aprueba la ordenanza. Ésta establece que si lo pide el determinado porcentaje de vecinos, debe aprobarse la ordenanza y por más que haya un porcentaje menor que no lo quiera, aún manifestándose en contra, se prioriza la decisión de la mayoría, como una cuestión democrática y, por el interés público, se aprueba la ordenanza y se avanza. Hay casos inversos: en mi gestión llevamos el gas natural a las casas que están en el acceso este de la casa que era de Jorge Montoya, ahora de Wilton Artusso y otros que están alrededor. Es una obra que está fuera del ejido urbano, entonces ¿por qué se hizo la obra? Se hizo por la demanda de los vecinos, a cargo de ellos absolutamente el costo de la obra, por eso, se los incluyó y se les hizo la obra. Entonces no tiene que ver con el radio la prestación de servicio estrictamente y no es verdad que el municipio está obligado a prestar servicios dentro o fuera del ejido, sino que se rige por las ordenanzas que regulan el tema de ese servicio o de esa obra y se respetan las pautas establecidas en la ordenanza”.
Decisión política: Pretto explicó claramente: “La decisión política que me motivó para trabajar en este tema fue que, primero, el Ministerio de Gobierno incitó a actualizar los radios. En función de eso y, teniendo el antecedente de Abecasis, nos pareció oportuno tener en cuenta el trabajo que había hecho Abecasis y le hicimos las modificaciones que, luego de consultar a la Dirección de Catastro, se nos indicó. La decisión política local es que es obvio que la ciudad ha crecido porque hay urbanizaciones espontáneas, algunas reguladas y otras no fuera del ejido viejo nuestro, del ejido actual vigente y, además, sigue creciendo la ciudad: de hecho, todas las viviendas que hay camino al cruce a la derecha, son una urbanización que ya está requiriendo cordón cuenta, alumbrado público o gas o lo que fuera. Hay servicios demandados de la gente que lo necesita, entonces, el criterio es que la ciudad está creciendo para los 360 grados y, por eso, respetamos la decisión de Abecasis e incluimos los criterios planteados por Catastro. Esto no tiene que ver con la coparticipación”.
Ejemplos: “Cuando se planteaba el tema de pago de impuesto y tasas, la gente decía, por ejemplo, que Camiletti tenía que pagar por metro cuadrado, pero esto no es así, lo va a hacer el día que decida urbanizar su campo, cumplir con la ley de loteo, aprobar el plano con lotes identificados con matrícula individual de la obra de infraestructura, que ahora la ley de loteo te exige que la obra esté construida, es decir, Camiletti tiene que hacer calles, cordón cuneta, alumbrado público, agua y hasta cloacas. Hay que diferenciar entre tasa e impuesto. Un campo que esté incluido dentro del radio no paga como urbano porque esté incluido en el radio, sino por el uso que le dé al suelo. El municipio no está obligado a llevar una obra, por ejemplo, el gas al campo de Camiletti porque tengo que pasar por 50 propiedades antes que todos tienen que pagar, como ocurre con la calle Sarmiento”.
Por último aclaró que si este debate público no existiera y se aprobara el ejido hoy, “la mayoría ni la minoría se enterarían de la situación ni los afectaría. Sí los va a afectar, por ejemplo, en el caso de que quede el radio como está. Hay algunos vecinos que yo he escuchado y están mal informados, por ejemplo, el que tiene quintas o producciones cercanas a la ciudad, tiene el temor de que si el radio los comprende, mañana tienen que dejar de trabajar y producir. Eso no es así porque eso depende de la planificación que hagamos una vez que tengamos el ejido y, si lo ha producido durante 100 años, ¿por qué no lo va a seguir produciendo ahora? Lo que sí va ser al revés y va a sufrir muchas consecuencias y se va a acordar de por qué el gobierno local no lo protegió es si llega a tener una denuncia. Supónganse que si se llega a construir una casa sólo con fin de vivienda familiar colindante con el lugar donde se produce. Ese señor si denuncia en Córdoba Ambiente, este ente viene, mide el grado de contaminación del área, si no está dentro de los parámetros, decomisa, se llevan las producciones y, después, el Señor tiene que realizar un juicio en Córdoba Ambiente. Mientras que si la decisión la tomamos acá, que para eso es el radio, de acordar de qué modo producir, qué barrera ambiental poner, ayudarlo a tener una línea de forestación. Hay muchas formas de acordarlo y lo decidimos nosotros en el gobierno local con la intervención de todos los actores. Ésa es la diferencia de tener un ejido que nos comprenda la mayor cantidad de actividades que hoy están activas. Si nosotros no lo decidimos, lo decide la ley por nosotros”.