El cruento episodio fue investigado por la fiscalía de nuestra ciudad y será juzgado por la Cámara Segunda del Crimen de Río Cuarto. Los cuerpos de las víctimas aparecieron maniatados en un canal
Según la acusación que formuló la fiscal de La Carlota, Ana Venturuzzi, los propietarios del campo, Luis Justo Antonio Caón y su pareja María Luisa Tula, fueron asesinados a escopetazos por los hermanos, quienes luego habrían intentado ocultar los rastros del crimen y habrían arrojado los cadáveres en el lecho de un canal que se encuentra en las cercanías de Laboulaye.
¿Cuál fue el detonante de semejante despliegue de violencia? La fiscalía de instrucción cree que antes del fatal desenlace se produjo una fuerte discusión entre los hermanos con el dueño del campo que aparentemente estaba relacionada con la venta de la soja de la campaña anterior, granos que se encontraban almacenados en el lugar.
La fiscal sostiene que, en la tarde del 4 de octubre de 2010, Caón y su esposa habían llegado al campo provenientes de Santa Fe. Allí se encontraron con el encargado del establecimiento, Alejandro Saavedra y con su hermano Luis. Luego de la discusión, los Saavedra, de común acuerdo, y “contando con el consentimiento uno de otro” habrían dado muerte a Luis Caón con el disparo de una escopeta calibre 16 larga que dio en el rostro de la víctima.
Siempre según el relato de la fiscalía, inmediatamente después del disparo para ocultar la muerte de Caón y procurar quedar impunes, los hermanos habrían dado muerte a la mujer con la misma arma de fuego y disparándole en el rostro, desde unos cuatro metros de distancia.
Pero ahí no terminó todo.
A continuación, le habrían quitado el pantalón a Caón y habrían desnudado por completo a Tula para atar los dos cadáveres a un bloque de cemento.
Para eso habrían utilizado alambres, en tanto que les habrían atado las manos entre sí al cuello, con una soga que terminaba en una argolla de hierro.
Una vez maniatados los cuerpos, los habrían trasladado en el vehículo de las víctimas -una camioneta Ford F100- a un canal ubicado en la zona rural, 35 kilómetros al norte de la ciudad de Laboulaye. Cuando llegaron al lugar, los tiraron al lecho de agua unidos a los bloques de cemento.
La fiscal aseguró que para evitar quedar vinculados al doble crimen, llevaron la pick up a la playa de estacionamiento de la terminal de ómnibus de Villa María, donde la dejaron abandonada, el día 5 de octubre de 2010.
Cuando se lleve adelante el juicio, los hermanos Saavedra serán defendidos por el abogado riocuartense Rolby Valdivieso, quien aconsejó a sus clientes que se abstengan de declarar cuando fueron llevados ante la fiscalía de La Carlota.
Quiénes son los imputados
Los dos hermanos que deberán responder a la acusación de homicidio calificado son:
Alejandro Agustín Saavedra, empleado rural de 38 años nacido en Laboulaye. Antes de ser detenido vivía en La Carlota junto a su esposa, sus dos hijos y su suegra. Ganaba un salario de 1.200 pesos y cobraba un porcentaje de las cosechas.
Luis Saavedra, peón rural de 47 años. Nacido en La Carlota, vivía con sus tres hijos en Los Cisnes antes de su detención. Al igual que su hermano, cursó hasta el segundo año del secundario. En el campo ganaba aproximadamente 800 pesos al mes.