Una emotiva reapertura de la escuela Ortiz de Ocampo

El jueves 31 de marzo de la semana, después de 14 años de permanecer en silencio, la campana de la escuela rural Ortiz de Ocampo, del campo Barreto, volvió a sonar y convocó a los nuevos 14 alumnos, a sus padres y ex estudiantes a la refundación del establecimiento.

Nadie faltó a la cita y ataviados con sus mejores ropas, los vecinos de toda la zona rural acudieron al acto para acompañar a los más chicos en su primer día de clases.

El acto de reapertura contó con la presencia de la inspectora de zona 4220, Miryam Valentini; la docente Sofía Campanille; el secretario de Educación de La Carlota, Ricardo Comelli; ex alumnos, abuelos y padres.

Cada instante del encuentro fue emotivo, ya que para la refuncionalización del colegio todos los vecinos colaboraron y trabajaron durante el último fin de semana largo, pintando, acondicionando instalaciones y hasta consiguiendo bancos para los estudiantes.

La docente, Sofía Campanille, que tendrá a su cargo las clases se refirió al acontecimiento diciendo: “Comenzamos este año escolar en una escuela vieja, pero renovada. Estamos dispuestos a emprender esta aventura de seguir creciendo. Sé como nunca que estar y permanecer serán el motor que hagan volver todas las fuerzas para mantener abiertas las puertas de esta institución tan querida”.

También participó del acto Hugo Antar Espinosa, ex alumno de la institución, quien tiempo atrás había dedicado una poesía donde expresaba su tristeza por ver el colegio abandonado. «La emoción que me embarga es muy grande. Creía que esta escuelita estaba muerta, que nadie la iba a resucitar. Por eso va, como ex alumno, mi profundo agradecimiento y felicitación para este puñadito de gente que insistió, habló y logró la reapertura. A los que vinieron a limpiar, a todos….”, expresó.

Espinosa recordó, además, que cuando concurría al colegio eran más de 30 los alumnos que asistían a clases.

Posteriormente, los presentes recorrieron el colegio y compartieron un brindis, mientras algunos chicos se preparaban para su primera clase.

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