Con gran alegría padres, alumnos, ex alumnos y vecinos de la escuela Ortiz Ocampo de Barreto recibieron la noticia de la apertura de dicho centro educativo.
Todo comenzó a principios del año pasado durante la gestión de la ex Inspectora de zona 4220, Adriana Bongiovani. Durante esta época, un grupo de padres y ex alumnos hicieron saber que en esa zona rural había alumnos que debían trasladarse a otros centros educativos lejanos y otros debían llegarse a La Carlota para poder ir a la escuela, además de hacerle saber que para el próximo año (actual 2011), se podría aumentar la matrícula.
Dicha inspectora recibió la documentación y se iniciaron los trámites. Vino el cambio de inspectora, a fines del año pasado y en este año nuevamente padres ex alumnos recordaron sobre la situación y, la actual Inspectora Miryan Valentini, recibió la documentación enviada al Ministerio, solicitando la reapertura del colegio con la firma de los padres y la cantidad de posibles alumnos.
La alegría vino el lunes pasado cuando se confirmó la reapertura del colegio con una matrícula de 14 chicos.
Fue espontánea la convocatoria, el 24 de marzo, aprovechando el feriado, padres, alumnos ex alumnos, colaboradores, empleados de la estancia La Magdalena, de Barreto, llegaron a las 7 de la mañana con palas, motosierras, algunos baldes, pinturas, artículos de limpieza y lo necesario para mejorar el viejo edifico cerrado hace 14 años.
Desde las estancia enviaron tractores con desmalezadota, caños de PVC, para conectar el agua… algunos levantaban lo que las máquinas cortaban, otras rasqueteaban las paredes, hasta un grupo electrógeno fue trasladado al colegio para tener el servicio de electricidad. Todo fue alegría y trabajo. Un padre consiguió una parte del mástil que los depredadores habían cortado
Los niños también ayudaron a sacar el pasto y algunos también encendieron el fuego para calentar el agua y disfrutar de unos mates.
La escuela Ortiz Ocampo de Barreto fue cerrada por falta de matrículas, según los ex alumnos, hace 14 años y, “desde ese día luchamos para que se reabriera y hoy llegó ese día” dijo una de las ex alumnas a FM Estrella.
La escuela está ubicada a metros de la ruta provincial número 4, a metros de la entrada a la estancia La Magdalena de la Familia Barreto. La escuela fue construida en épocas en que dicha estancia contaba con cientos de empleados y colonos. También en el lugar existía la estación ferroviaria denominada Barreto… El paso del tiempo, la división de los campos, la modernización o distintos factores hicieron que, poco a poco, se fuera quedando cada vez menos gente en el campo y, paralelamente, la despoblación en la escuela, hasta llegar al cierre de ella.
La docente designada, Sofia Campanille, en diálogo con FM Estrella dijo:»Es una gran emoción ver tanto cariño y tanto esmero por poner en marcha la escuela. Me comunicaron el lunes que había 21 de marzo que había sido designada a la escuela. Me dieron los teléfonos de los padres, vinimos a ver la escuela y todo fue así de rápido. La Municipalidad de La Carlota nos donó la pintura, y la estancia La Magdalena y otros vecinos López Mayorga, Martinasso, entre tantos, nos están ayudando con lo que sea necesario para la limpieza de l a escuela, la reparación de baños…
Tenemos un albañil que vino a colaborar, los padres, abuelos, ex alumnas rasqueteando paredes…es increíble ver tanta colaboración”.
Consultada sobre el mobiliario de la escuela, agregó: “Hoy iremos a buscar bancos a Santa Eufemia de una escuela, otros nos acercaran de La Carlota y, una vez instalados, organizaremos algún evento para recaudar fondos y preparar una biblioteca. Ya nos han donados libros, cuadernos y varias cosas que los ex alumnos y amigos están consiguiendo”.
Una de las ex alumnas. Graciela Flores, ante la consulta acerca de cómo estaba expresó: «muy contenta. Costó, pero lo logramos: se abre la escuela de nuevo”. Carlos Torres, no de los colaboradores señaló: “Me parece mentira… si habré trabajado cuando venían mis hijos a la escuela y hoy lo hago más orgulloso porque volvemos y vendrán mis nietos, siempre trabajando por la escuela…era triste verla cerrada”.
Elena Gigena, esposa de Torres agregó: «Yo integro la vecinal del Hospital y, desde nuestro lugar, donamos la bandera para el mástil. Seguro que aparecerá el que done las banderas de ceremonias; otros donarán libros, cuadernos” (…) “a esta escuela no le va a faltar nada, estamos seguros”, puntualizaron otros colaboradores.
Con gran alegría, grupos de alumnos, padres, abuelos, colaboradores y tanto insistir por la apertura de la escuela, el centro educativo Ortiz Ocampo de Barreto está abierto para recibir a estos 14 niños que tenían dificultades para irse a otros centros. Hoy, eso, ya no es un problema.