Desde hace dos semanas, el centro educativo Cabildantes de la Carlota no tiene en funcionamiento el comedor PAICOR. Allà concurren unos 200 chicos que reciben la merienda, el desayuno y almuerzo. Recordemos que dicha escuela tiene el proyecto de extensión áulica, por lo que, todos los chicos deben utilizar el comedor.
Pero desde hace 2 semanas no funciona porque las condiciones de baños y desagües de la precaria cocina que tiene la escuela se taparon y el lÃquido cloacal comenzó a desbordar hacia el patio. Ante esta situación es que se decidió no hacer más el almuerzo y entregar módulos alimentarios para que los alumnos tengan su vianda diaria.
FM Estrella entabló un diálogo con la inspectora de zona 4220 Miryam Cecilia Valentini, y dijo: «hoy hemos firmado el convenio con la empresa de Sandro Rinaldi quienes harán las obras: colocar nuevas cañerías en la cocina para el agua caliente, aspecto cosa del que se carece y esto hace de que se utilice el agua fría para el lavado (lo que hace que se acumule grasa en cañerías), luego se colocarán caños en los baños que separan las cañerías de cocina por un lado y baños por el otro. Hoy es el mismo caño».
También se consultó sobre si esto afectará el normal desarrollo de clases en el centro educativo a los que la inspectora dijo “no afectará para nada porque hemos tomado precaución y los niños no van al sector donde se desbordaron los caños de cloacas. Allà colocaremos arena para el rápido secado del lugar. De todas maneras se cercará para que los chicos no lleguen hacia ese sector. No hay problemas para dictar clasesâ€.
Sandro Rinaldi, arquitecto que tendrá a su cargo la obra explicó qué tipo de obra se realiza y dijo, además, que quien aporta el dinero es la Infraestructura de la Provincia. “Esperamos poder iniciar lo mas rápido posibleâ€, agregó.
Estas son las condiciones en la escuela Cabildantes de La Carlota. Mientras tanto se espera que en algún momento se construya la cocina y comedor prometidos por tantas autoridades de la Provincia: el de hacerlas en los próximos meses porque los niños y docentes, junto al personal, deben «armar» todos los días el comedor en el salón de actos, y en una parte de un pasillo de la escuela deben cocinar. Ese pasillo no puede más y se espera la cocina donde abunde el agua y se eviten estos casos como el que hoy vive el Cabildantes.