Una joven de nuestra ciudad que residía en Rosario, murió tras la práctica de un aborto clandestino.

Una joven cordobesa murió este sábado en Rosario, luego de intentar abortar a los mellizos que esperaba y de los que llevaba tres meses de embarazo.
La enfermera que le practicó el aborto, una mujer de 46 años, ya quedó detenida.
María Raquel Díaz, de 21 años, era oriunda de la ciudad de La Carlota, pero que desde hace tres años residí­a y trabajaba en Rosario.
La joven era mamá de dos niños pequeños y estaba embarazada de tres meses y esperaba mellizos.
Esa situación aparentemente la desesperó y resolvió practicarse un aborto, con una enfermera que era la mejor amiga de su madre.
El aborto terminó con la muerte de María Raquel, y sus dos hijos huérfanos.
El subcomisario Julio Brunelli, dio detalles del trágico caso
El hecho tuvo lugar el sábado por la tarde en un departamento del barrio Fonavi ubicado en Grandol y Gutiérrez y fue denunciado por un hombre de 36 años, pareja de la enfermera que practicó el aborto.
«El sábado por la tarde llegó a la comisaría 15 un muchacho muy nervioso y dijo que había visto y participado de un aborto y vio que la chica se murió y se desesperó», señaló el efectivo.
Según relató, cuando apresaron a la mujer, esta dijo que había cometido una atrocidad «porque había asesinado a la hija de la mejor amiga de ella»
Brunelli confirmó que el cuerpo sin vida de la chica estaba en el interior de un baúl de un auto.
«Secuestramos algunos elementos pero observamos que hacer abortos no era algo que practicaba en la actualidad. Lo que pudimos observar es que la mujer estaba en el curanderismo ya que en el lugar había muchas estatuas de San La Muerte»
La madre de María Raquel ya identificó el cadáver de su hija.
La enfermera está presa y hoy declararía en Tribunales.
Según el jefe de la Unidad de Terapia Intensiva de la Maternidad Ramón Sardá, José Luis Golubcki, en el país se realizan unos 600 mil abortos clandestinos al año y entre 2.100 y 2.400 terminan con la muerte de la paciente.