Una fuerte tormenta de viento y tierra azotó, el viernes 16 de septiembre después de las 17 horas, a nuestra ciudad: un fuerte viento llegó con ráfagas que, según lo expresado por algunos vecinos, superó los 80 y hasta los 90 km por horas. Caídas de postes, cables de electricidad, del sistema de cable, telefónicos, además de poca visibilidad en la ciudad y afueras de la misma, tuvieron lugar durante horas del viernes. Hubo cortes de energía por el intenso viento hasta que, alrededor de las 20, el corte fue general hasta pasadas las 21 horas. Cuadrillas de EPEC trataban de dar solución en distintos sectores en los que el fuerte viento- con la caída de alguna rama- cortó el servicio. Bomberos Voluntarios fueron convocados durante todo el día por incendios de pastizales, incluso pasadas las 18 horas debieron trabajar arduamente en el accidente de la ruta nacional 8, en el que, una mujer perdió la vida. (Ver Nota: ACCIDENTE SIMULTÁNEO EN LA RUTA 8). Desde la Departamental Juárez Celman se informó que para evitar accidentes se interrumpió el paso de todos los vehículos en las rutas 8 desde La Carlota a Reducción, involucrando nuestra ciudad, a Los Cisnes, Alejandro y Reducción. Las playas de estacionamiento se encontraban cubiertas de vehículos a la espera de que calmara el fuerte viento. También fueron interrumpidas la Rutas Provincial número 4 desde Santa Eufemia hasta Laboulaye y desde El Rastreador hasta Adelia María.
Mientras dotaciones de Bomberos Voluntarios trabajaban en el accidente, otras dotaciones partieron hacia un campo que había tomado fuego y, por el fuerte viento, avanzaba hacia campos y rutas de la zona de Asunta.
En varios sectores escaseó el agua por estar fuera de servicios las bombas impulsoras. Lo mismo ocurrió con el sistema de cloacas que dejaron de funcionar durante más de dos horas. El servicio eléctrico también estuvo fuera de servicio.
Alrededor de las 21,30 todo comenzó a normalizarse y los vecinos comenzaron a salir de sus casas o, en muchos casos, recién pudieron regresar a sus hogares al quedar «varados» en las rutas por el corte.
Fue intensa la labor de Bomberos Voluntarios, Policías y Personal de Salud del Hospital y clínicas que estuvieron asistiendo a los heridos del accidente y atendiendo a otros siniestros. La mayoría de los comercios cerraron sus puertas antes de los horarios habituales para regresar a sus domicilios y, ante la falta de energía eléctrica, no hubo víctimas ni heridos graves, salvo lo del accidente registrado en la ruta nacional. El fin de semana todo fue normal.