El avance de la campaña está por debajo del de los últimos dos años en la provincia. Noviembre revirtió el cuadro de humedad.
La falta de lluvias en el arranque de la primavera demoró la implantación de lotes de soja y de maíz en la provincia. De acuerdo al último informe publicado por la Bolsa de Cereales de Córdoba, en ambos granos hay un avance de siembra menor que al de las últimas dos campañas.
Según ese relevamiento, en el caso de la oleaginosa, mientras se cubrió el 44% del total de la estimación para esta campaña con soja de primera, el año pasado el registro alcanzó el 46% y el año previo, el 49%.
Por el lado del cereal, apenas el 27% será de primera mientras que en 2018 fue del 34% y en 2017, del 33%.
El relevamiento realizado durante la segunda quincena de noviembre, indica que ya se alcanzó un avance de siembra del 55% de las 4.118.000 de hectáreas estimadas a implantar con soja durante esta campaña en Córdoba, quedando por sembrarse 1.867.658 hectáreas. Del total, se estima que el 44% correspondió a siembras tempranas precedentes al 15 de noviembre, mientras que el 56% restante se realiza en siembras posteriores a dicha fecha. Comparando con el promedio de siembras tempranas de las últimas 2 campañas, esta proporción resultó ser inferior en 3 puntos porcentuales, debido principalmente al retraso que hubo en las primeras lluvias que otorgaron la suficiente humedad a los perfiles del suelo.
Maíz
En el caso del cereal, la superficie estimada es de 2.738.800 de hectáreas, de las cuales se sembró el 36%, correspondiente a 988.500 hectáreas. Los maíces tempranos, implantados hasta el 1 de noviembre representaron el 27% del total, lo que implica 7 puntos porcentuales menos de siembras tempranas que el ciclo pasado, y que equivale a unas 200.000 hectáreas que debido a la falta de humedad en los suelos no pudieron ser sembradas a término.