El defensor del Pueblo Decara denunció penalmente a la firma Córdoba-Coata

 Tras el incendio de un coche de la empresa Córdoba Coata, el defensor del Pueblo de la Provincia, Mario Decara, realizó el jueves una presentación judicial pidiendo se investigue la responsabilidad de la firma ante posibles hechos de deficiencia y negligencia en la prestación de servicio.

“Evitemos otra tragedia como la de la estación Once”, pide Decara, en alusión al riesgo en que estuvieron los pasajeros del colectivo siniestrado en Villa María.
Cabe destacar, además, que el funcionario recibió el miércoles  a  usuarios que le acercaron una nota que detalla los problemas que tiene el servicio y los riesgos a los que se exponen cada vez que abordan los colectivos que circulan por el sur cordobés, los cuales sufren constantes roturas, tienen vidrios o puertas rotas, pérdida de cubiertas y hasta cucarachas por la falta de higiene. A lo que se suma el hecho más reciente del incendio de una unidad en plena terminal de Villa María.Decara había prometido acompañamiento a los reclamantes, y ayer concretó su intervención presentando la denuncia en la Fiscalía Distrito 2, Turno 4, a cargo del doctor Víctor Chiappero.

Asimismo, el defensor ya había iniciado gestiones ante el Ente Regulador de Servicios Públicos y la Subsecretaría pidiendo a estos órganos que intervengan ante un reclamo que hicieran tiempo atrás usuarios de La Carlota.

A ello se suma el petitorio rubricado por 2.100 usuarios de 11 localidades en las que Córdoba Coata tiene la concesión del transporte, quienes dicen que son “víctimas en primer lugar de la violación reiterada de los derechos que nos amparan como consumidores, pero también de condiciones vejatorias que debemos soportar”.

Una burla a los usuarios

En diálogo con PUNTAL, uno de los usuarios que movilizaron la juntada de firmas, Juan Cruz Fanin, quien es oriundo de Justiniano Posse y cursa el cuarto año de la carrera de Abogacía en Córdoba, contó la situación que padece, al igual que los miles de viajeros del sur cordobés. Asimismo, dijo estar indignado con los dichos del gerente de la empresa de transporte, Enzo Noriega, quien relativizó los reclamos y señaló que éstos están magnificados.

“Es realmente una burla a quienes somos los pasajeros. Yo lo invito (a Noriega) a que tome uno de los colectivos de su empresa, que vea cómo viajamos en colectivos sucios; que hace dos fines de semanas seguidos que los  colectivos que salen de Posse quedan varados y tienen que cambiar. Sin ir más lejos, una semana atrás, a 20 kilómetros de Bell Ville, en la localidad de Los Patos, se llenó de humo y tuvieron que bajarse a la banquina y esperar 2 horas la llegada de otro coche. Que vea cómo viajamos parados, inseguros, qué se siente al lado de las cucarachas que salen entre las ventanas”, señaló Fanin.

“Si eso es magnificar tenemos dos significados totalmente opuestos de la misma palabra”, sostuvo el estudiante de Abogacía.

Respecto de las declaraciones de  Noriega, dejando entrever que el servicio no es rentable, Fanin dijo: “No pueden decir que no da rentabilidad, porque ninguna empresa va a estar 30 años perdiendo plata”.

“Si la empresa no recibe subsidios, o tiene un problema con las tarifas, no es nuestro inconveniente. Que ellos se encarguen de pedir a las autoridades. No es excusa para prestar un servicio decadente, porque con la misma justificación una empresa podría decir que nos vende leche podrida porque no le es rentable conservar la cadena de frío”, ejemplificó.

Desde hace ya tiempo, este usuario junto a otros iniciaron una campaña para recolectar firmas y reclamar por el servicio y en sólo 15 días se logró un total de 2.100 adhesiones al reclamo por el mal estado de este servicio.

El pasado 12 de junio se presentaron sendas notas a Transporte de la Provincia y al Ersep. Y otra con el mismo contenido fue entregada en manos esta semana al defensor del Pueblo de la provincia, Mario Decara.

Los reclamos

En los petitorios elevados se detallan los numerosos problemas que soportan los viajeros que utilizan esta línea de transporte. Entre éstos se destacan:

– El incumplimiento del horario de partida y arribo.

– Falta de condiciones de higiene.

– Las reiteradas fallas mecánicas en los colectivos de todo tipo que pueda imaginarse: pérdidas de tornillos, aumento desmedido de la temperatura del motor, haciendo que por ejemplo el ómnibus se detenga, deje de funcionar y el pasajero deba esperar horas varado en la autopista o ruta esperando la llegada de un nuevo coche.

– Pérdidas ocasionales de las ruedas. (“Adjuntamos nota en la que se muestra que meses atrás, en el cruce de rutas 3 y 6, a 5 kilómetros de Justiniano Posse, el colectivo perdió una de sus cubiertas).

– Lluvia interna. Los colectivos tienen orificios (de tamaño considerable) por donde pasa el agua, lo que hace que un día de tormenta llueva dentro del ómnibus.