En cuanto a la denuncia que manifestó un vecino sobre la comercialización de productos vencidos y su consecuente preocupación a los medios, el titular del Área de Bromatología, Mauro Oviedo señaló a FM Estrella que “se han detectado alimentos vencidos. Con el personal que tenemos, estamos haciendo controles, principalmente, con los grandes comercios que abarca minimercados y supermercados y sí, hay muchos productos vencidos con mucha fecha (principalmente de conserva) y productos que están a la venta, pero ya con la fecha límite. Éstos se pueden vender estando en las fechas legales. Hemos sacados pastas, conservas, galletas, fiambres y carne”.
Productos secos: “En cuanto a los productos secos con bajo actividad de agua (fideos, galletas…) tienen una tolerancia límite. Si el producto vence el día 15 y se consume el día 17 ó 20 no pasa nada. Pero hay una cuestión legal que establece que debe haber una fecha de elaboración y una de vencimiento y no debe ser vendido más allá de esa fecha. No significa que ese producto, consumido una fecha después, produzca daño, pero sí el riesgo de causar problemas es cuando se consume muy alejado de la fecha”.
Por ordenanza, los alimentos vencidos se deben retirar: “Desde el Área, así el producto sea seco o fresco, nosotros lo sacamos de esa área. Nos guiamos por la fecha de vencimiento. Hemos tenido, incluso, muchos reclamos de por ejemplo, pollos. El pollo tiene una fecha de vencimiento y, desde los supermercados, cuando la fecha está al límite, lo ponen de oferta. Si uno adquiere ese producto está dentro de la fecha y debe ser consumido ese día. Si el cliente lo guarda y lo consume días después, obviamente se corre riesgo y el supermercado no se hace cargo”.
“Los comercios lo que alegan ante el retiro de los productos es que los recambios lo hacen los chicos encargados de las góndolas. Muchas veces el dueño o el encargado objetan que es el gondolero el que no se fija, pero más allá del constante cambio de empleados que hay, el responsable es el dueño. El chico que entra debe ser preparado para esas cosas”.
Controles: “Los controles se hacen en los comercios que trabajan con grandes cantidades porque, quizás, una despensa compre 10 ó 15 conservas y las venda; en cambio, el súper grande, no. No significa que a los comercios más chicos no se lo viste, se los visita, pero en menor frecuencia”.
“Tenemos a cargo tres chicas con ayuda de un vehículo para trasladar los alimentos. Lo que hacemos con ellos, cuando son productos vencidos- lo que la ordenanza establece- es que sean decomisados. Se hace un acta y se deja a disposición del Juez de Faltas. Cuando son productos que tienen problemas de papeles, cuando faltan sellos o firmas para la parte legal, se deja el producto decomisado por 48 ó 72 horas hasta que el propietario haga el descargo correspondiente. Y si no hace el descargo, el producto es decomisado: si se puede cocinar, irá al canil municipal o se crema”.
“No son controles diarios, por la cantidad de establecimientos que hay en la ciudad, los controles son dependiendo de la cantidad de productos que el comercio expenda: mensual en los supermercados y cada dos meses también, todo depende del grado de venta que tenga el establecimiento”.
Atención a tres alimentos en especial: “En cuanto a la falta de vestimenta que reconoce a personal de Bromatología que realiza inspecciones, Oviedo dijo: “Hay camperas y remeras con el logo de la Municipalidad”. Por último dijo que hay que prestar atención a los pollos, ensaladas en bandejas y carne picada”, finalizó Mauro Oviedo, titular del Área de Bromatología.