La ex presa política señaló que el promedio de edad de quienes estuvieron detenidos durante la última dictadura militar y fueron sometidos a torturas y terribles condiciones de vida está entre los 55 y los 62 años. “Queremos que se junten las causas y así se le pueda dar tratamiento a todas”, sostuvo la militante.
Waitman indicó que hay muchas causas que aún están siendo investigadas y que todavía no han sido ni siquiera elevadas a juicio, por lo que los procesos se pueden extender ampliamente en el tiempo.
Recordó que este año ya tienen fecha de comienzo dos causas, una contra ex miembros del Comando Radioeléctrico y otra sobre hechos de La Perla (ver aparte). Lo destacó como un avance pero insistió en la necesidad de continuar con las otras.
– ¿Qué medidas se pueden tomar para acelerar las causas?
– Queremos que se termine esto, por eso creemos que si se agrupan por centro clandestino, por ejemplo, se podría dar un gran avance. Sucede que si hay hechos que no se incorporan a estos juicios, después se tendrá que hacer todo el proceso de nuevo por las víctimas que quedan afuera. Ante cada nuevo proceso se da un desgaste muy grande de los testigos que declaran en las audiencias, con todo lo que implica recordar lo que sufrieron.
Economía procesal
“Desde que asumimos planteamos la necesidad de que se juzgue la mayor cantidad de causas por año”, dijo el secretario de Derechos Humanos de la Provincia, Raúl Sánchez, en tanto que agregó: “Es por eso que se ha creado la Dirección de Protección de Testigos, que busca garantizar el cuidado de quienes declaran en los juicios”.
Sánchez consideró que deben ser juzgados todos los responsables y que no deben quedar impunes los crímenes ocurridos en la provincia. “Es importante acelerar y unir en un juicio varios procesos, porque además permite hacer una economía procesal”, consideró el funcionario provincial.
“Los imputados y las víctimas fallecen con el paso del tiempo, pero nosotros queremos que se haga justicia con todos ellos en vida”, concluyó el secretario de Derechos Humanos.