Los puestos de venta de licuados y panchos en la Plaza San Martín tienen todo en regla para poder seguir trabajando en el lugar.
La duda, recordemos, había surgido en una sesión en el Concejo Deliberante: se habían admitido algunas irregularidades en el servicio de estas comidas. Aparentemente, los puestos callejeros se conectaban a la luz del alumbrado público, por lo que, había dudas respecto de la energía eléctrica de la que se nutrían.
Ahora bien, se informó que las condicione son legales: los puestos cuentan con el certificado de BromatologÃa aprobado por la Municipalidad de La Carlota, cuentan con el palo donde está instalado un pilar de luz aprobado, también, por la Municipalidad y los pagos de impuestos mensuales por venta ambulante están comprobados ( a pesar de sólo trabajan los fines de semana).
Sin dudas, los puestos callejeros están autorizados por el municipio.