Fiestas patronales en Olmos y su especual historia…
Como todos los años, en este lugar que en su momento fue una población que, de acuerdo con lo expresado por algunos ex habitantes superaban largamente los 1000, hoy sólo vive una familia. En el lugar está programado la Fiesta Patronal en honor a Santa Teresita del Niño Jesús.
Todo comenzará el domingo 3, día de la Virgen, con una misa y procesión en las pocas calles que quedan del pueblo.
Para esta fecha, siempre los ex habitantes recuerdan la tan importante conmemoración y es así que, para los que deseen participar, saldrá un ómnibus a las 9 de la mañana desde la esquina de Juárez Celman y José Benito Lagos; el local El Viejo MatÃas, propiedad de un ex habitante del pueblo, quien durante esta semana está anotando a los pasajeros que quieran acompañarlo para el acontecimiento.
Muchos son los que recuerdan a Olmos como un pueblo que, en su momento, tenÃa una gran actividad: existÃan almacenes de ramos generales, venta de combustible, había un salón de Fiestas con pista incluida y hasta palcos a los costados debido a que cada vez que había un acontecimiento en el pueblo, eran chicas las instalaciones. Los campeonatos de futbol hasta se pensó, en algún momento, sumarlos a la Liga de fútbol de Canals.
Los vecinos del pueblo vivÃan de las estancias ubicadas en la zona. Además los chacareros, los tamberos y las barracas que había en el pueblo originaban un gran movimiento que se veÃa reflejado el fin de semana en las reuniones sociales que el pueblo tenÃa.
Pero, poco a poco, se fueron alejando los vecinos y hoy sólo hay una familia vive en la vieja estación.
Muchos creen que el hecho que dejara de pasar el tren hizo que el empezara a desaparecer. Cuando el tren pasaba, siempre había trabajo, ya sea para cargar o descargar lo que el tren trajera o llevara, desde mercaderías hasta el cargamento de animales vacunos. Todo originaba trabajo.
Pese a que se intentó subsistir con lo que había, los centros más grandes como Canals y La Carlota ofrecían mejores posibilidades, especialmente a los niños que terminaban la escuela primaria. Otros vecinos se fueron buscando «nuevos horizontes» y esto hizo que se fueran levantado desde el destacamento de policía hasta la misma escuela que con el tiempo también se comenzó a caer ante la falta de mantenimiento por parte del estado provincial. Ante esta situación los pocos alumnos y la única maestra siguieron cursando y dictando sus clases en el lugar que funcionaba el Destacamento Policial.
Al disminuir la matrÃcula y en la gestión del Gobernador Mestre, se decidió cerrar la escuela y ya nada motivaba quedarse en el pueblo.
Al tiempo, las viejas casas se transformaron en «taperas», quedando habitables no más de 3. Hoy existen sólo algunas calles, las demás ya no existen: son cercos y montes que se fueron transformando en matorrales de árboles y yuyos.
A comienzos del año pasado, luego de intensas gestiones de la Inspectora de zona, Adriana Bongiovani; del Productor Agropecuario, Patricio Kilmurray y de quien estaba en ese momento a cargo de la capilla Presbitero, el padre Pablo Silveti, se reabrió la escuela para que varios niños de la zona rural concurran a la escuela. Esto hizo que se acondicionara la capilla y, allí, funciona hoy la escuela que alberga a unos 7 niños.
Pero la devoción por esta capilla de Santa Teresita puede más y es por eso que todos los años son más de 100 los ex habitantes que se trasladan a Olmos para acompañar a la Virgen y recorren las pocas calles que aún quedan en lo que era el pueblo.
Los ex vecinos dicen que este año será igual y, por eso, cuando finalice la misma tendrán las primeras comuniones de chicos que viven en la zona.
Finalmente, decimos que Olmos es un paraje hoy, que está ubicado a 15 km por calles de tierra de La Carlota a la vera de las vÃas férreas y, seguramente, muchos irán, además de en el del micro, en sus vehÃculos particulares para acompañar ala imagen de Santa Teresita del Niños Jesús.