MIERCOLES SANTO.

Historia de la confabulación de Judas Iscariote para delatar a Jesús. Anexo de textos bíblicos (Mateo 26. 14-16; Marcos. 14. 10-11; Lucas. 22. 3-6; Juan 11. 45-57)

beso_judasEl Miércoles Santo es el dí­a que Judas se puso de a cuerdo con los enemigos de Jesús para entregárselo por el precio de 30 monedas de plata. Es entonces cuando Judas busca a los jefes del pueblo judío y les dice: «¿Qué me dais si os lo entrego?». Ellos se alegraron y prometieron darle dinero.

 

MATEO

26:14 Entonces uno de los doce, que se llamaba Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes,

26:15 y les dijo: ¿Qué me queréis dar, y yo os lo entregaré? Y ellos le asignaron treinta piezas de plata.

26:16 Y desde entonces buscaba oportunidad para entregarle.

 

MARCOS

14:10 Entonces Judas Iscariote, uno de los doce, fue a los principales sacerdotes para entregárselo.

14:11 Ellos, al oírlo, se alegraron, y prometieron darle dinero. Y Judas buscaba oportunidad para entregarle.

 

LUCAS

22:1 Estaba cerca la fiesta de los panes sin levadura, que se llama la pascua.

22:2 Y los principales sacerdotes y los escribas buscaban cómo matarle; porque temían al pueblo.

22:3 Y entró Satanás en Judas, por sobrenombre Iscariote, el cual era uno del número de los doce;

22:4 y éste fue y habló con los principales sacerdotes, y con los jefes de la guardia, de cómo se lo entregaría.

22:5 Ellos se alegraron, y convinieron en darle dinero.

22:6 Y él se comprometió, y buscaba una oportunidad para entregárselo a espaldas del pueblo.

 

JUAN

11:45 Entonces muchos de los judíos que habían venido para acompañar a María, y vieron lo que hizo Jesús, creyeron en él.

11:46 Pero algunos de ellos fueron a los fariseos y les dijeron lo que Jesús había hecho.

11:47 Entonces los principales sacerdotes y los fariseos reunieron el concilio, y dijeron: ¿Qué haremos? Porque este hombre hace muchas señales.

11:48 Si le dejamos así­, todos creerán en él; y vendrán los romanos, y destruirán nuestro lugar santo y nuestra nación.

11:49 Entonces Caifás, uno de ellos, sumo sacerdote aquel año, les dijo: Vosotros no sabéis nada;

11:50 ni pensáis que nos conviene que un hombre muera por el pueblo, y no que toda la nación perezca.

11:51 Esto no lo dijo por sí mismo, sino que como era el sumo sacerdote aquel año, profetizó que Jesús había de morir por la nación;

11:52 y no solamente por la nación, sino también para congregar en uno a los hijos de Dios que estaban dispersos.

11:53 Así que, desde aquel dí­a acordaron matarle.

11:54 Por tanto, Jesús ya no andaba abiertamente entre los judíos, sino que se alejó de allí a la región contigua al desierto, a una ciudad llamada Efraín; y se quedó allí con sus discípulos.

11:55 Y estaba cerca la pascua de los judíos; y muchos subieron de aquella región a Jerusalén antes de la pascua, para purificarse.

11:56 Y buscaban a Jesús, y estando ellos en el templo, se preguntaban unos a otros: ¿Qué os parece? ¿No vendrá a la fiesta?

11:57 Y los principales sacerdotes y los fariseos habían dado orden de que si alguno supiese dónde estaba, lo manifestase, para que le prendiesen.