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El gobierno argentino solicitó un «waiver» al consorcio de bancos chinos financiadores de las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner en Santa Cruz para desbloquear casi USD 800 millones. Estas obras, fundamentales para la infraestructura energética del país, se han paralizado desde diciembre, afectando el cronograma original que preveía su finalización en 2020. La pandemia y otros factores han contribuido a los retrasos significativos en la construcción de estas represas, consideradas vitales para aumentar la capacidad eléctrica de Argentina en un 4,5%.
La aprobación del waiver por parte de los bancos chinos es esperada para la próxima semana, lo que permitiría al Ministerio de Economía gestionar formalmente los fondos necesarios para la reactivación de las obras. Además del desbloqueo financiero, la reanudación de las actividades está condicionada a la normalización de los contratos entre las empresas constructoras y Energía Argentina (Enarsa). El último desembolso, realizado en noviembre de 2022 por USD 500 millones, no ha sido suficiente para mantener el ritmo de construcción.
La reactivación de este proyecto es crucial no solo por su impacto en la oferta energética, sino también por la generación de empleo. Se estima que la reanudación de las obras podría recuperar hasta 5.000 empleos directos e indirectos, lo que representaría un impulso significativo para la economía local y regional. La construcción de estas represas también busca reducir la dependencia del país de las importaciones de energía, fortaleciendo así su autosuficiencia energética a largo plazo.
En el contexto de las relaciones bilaterales entre Argentina y China, la reanudación de las obras de las represas forma parte de una agenda más amplia de cooperación y financiamiento. Las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner son proyectos estratégicos que reflejan la importancia de la colaboración internacional en el desarrollo de infraestructuras críticas. Esta cooperación no solo tiene implicaciones económicas, sino también geopolíticas, subrayando la relevancia de China como socio clave para Argentina.
En resumen, el gobierno argentino está enfocado en reactivar las represas de Santa Cruz, gestionando el desbloqueo de casi USD 800 millones de financiamiento chino. Este proyecto no solo es vital para aumentar la capacidad eléctrica del país, sino también para impulsar el empleo y reducir la dependencia energética. La aprobación del waiver y la normalización de los contratos son pasos esenciales para avanzar en esta iniciativa estratégica.
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