La vida del cura Brochero será el motivo para acercar a la comunidad de la Carlota, sobre todo a los niños, al ejemplo de vida que lego el primer Santo argentino, en este caso a través de una muestra de arte quiteño.
La cita es en el salón paroquial, los días 17, 18 y 19 de septiembre, desde las Es una técnica vinculada con la religiosidad popular. Son tallas en madera revestidas en tela. Son 13 escenas muy pintorescas que exhiben la fe y la obra del santo. La artista Raquel Majorel intenta hacer visible el legado de Brochero entre los más chicos.
Hace algunos años, Raquel Majorel estaba leyendo una carta que el Papa Juan Pablo II escribió a los artistas cuando sintió que la inspiración le tocaba el corazón. Aquellas palabras que invitaban a «redescubrir la profundidad de la dimensión espiritual y religiosa que ha caracterizado el arte en todos los tiempos» la empujaron a diseñar un proyecto para conjugar su talento y su devoción brocheriana con una necesidad: difundir la obra del Cura Gaucho, sobre todo entre los más chicos.»Advertí la necesidad de retratar la vida de Brochero con el arte quiteño, que es muy colorido, llamativo y detallado, y que yo aprendí en Colombia, cuando viví allí con mi familia, años atrás», dijo Majorel y agregó: «El objetivo siempre fue y es hacer ‘más visible’ el legado de este hombre inmenso, sencillo y humilde, de una manera que despertara la curiosidad de los niños, ya que el registro fotográfico que existe es pobre y descolorido».Con Brochero santo, la obra despierta mucho interés y se hace camino en escuelas y en parroquias de la provincia.
Una técnica especial.