Luego de una intensa jornada de trabajo la lluvia aplacó la extrema situación que debieron soportar los bomberos que combatieron el fuego durante los últimos días
Las precipitaciones en las zonas en donde se registran incendios no fueron abundantes, aunque sí suficientes como para detener el avance de las llamas.
“Estas lluvias han mejorado mucho la situación de los incendios forestales en la Provincia en donde en este momento no hay focos activos”, aseguró esta mañana el secretario de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil, Claudio Vignetta.
“Por el momento están en guardia de cenizas los focos de La Granja, Villa de María de Río Seco y el de Achiras, y contenido el de Capilla del Monte. Se trata de un perímetro muy extenso que durante el día va a ser controlado por más de 70 bomberos observando que no haya reinicios”, agregó
Para los casos de La Granja, Villa de María de Río Seco y Achiras, serán los propios bomberos locales quienes realizarán un monitoreo de cada incendio hasta verificar su total extinción.
“La baja de la temperatura mejoró las condiciones en toda la provincia en cuanto riesgo de incendios forestales”, concluyó Vignetta.
En todos los sectores siniestrados fue incansable la tarea desarrollada por bomberos voluntarios, brigadistas de Nación, personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego, de Defensa Civil, de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Catástrofes y Protección Civil, y efectivos de la Policía de Córdoba.