La denuncia de un trabajador rural de 73 años tras haber sido golpeado desnudó una triste realidad que soportaba un grupo de personas en un campo de Alejandro, donde se encontraron con otras siete, entre ellas una mujer que había sido golpeada y varios niños no escolarizados. Todos viviendo en condiciones paupérrimas.
En lo que va de este año son numerosos los casos detectados por Uatre, Renatre y el Ministerio de Trabajo, que, a partir de inspecciones, detectan a obreros rurales no registrados.
El último hecho ocurrió este miércoles en un campo de Alejandro y fue un peón, que, tras ser golpeado por su patrón, decidió radicar la denuncia en la comisaría local. Inmediatamente se intervino y, luego de la inspección realizada en el predio rural, se detectó a una mujer que admitió también haber sido golpeada y a niños que no estaban escolarizados. En total, 7 integrantes de una familia, más el adulto mayor denunciante.
Los inspectores de los organismos intervinientes comprobaron además falta de ropa de trabajo, condiciones de habitabilidad deplorables y los niños no estaban escolarizados.
Víctor Olmedo, el delegado regional de Uatre, lamentó que se sigan reiterando este tipo de situaciones y sostuvo que en lo que va de los últimos dos años son múltiples los procedimientos en los que se detectó a personal precarizado. “Nosotros procedemos ante denuncias y en otros casos haciendo procedimientos aislados”, indicó.
Peón denunció ser golpeado
Respecto de la intervención ocurrida este miércoles en un campo de Alejandro -del cual evitó dar nombre hasta tanto accione la Justicia, el delegado explicó: “Este peón de más de 73 años se presentó en la comisaría de Alejandro y denunció que su patrón le había pegado. También dijo que una mujer que se encontraba en el establecimiento con su familia haciendo alambrados trató de defenderlo y recibió un golpe de puño del patrón”.
Notificados del hecho, inspectores de Uatre, Renatre y del Ministerio de Trabajo concurrieron al lugar y por espacio de 12 horas estuvieron haciendo actuaciones y rescataron del lugar a todos los obreros y los menores, quienes fueron trasladados a Río Cuarto para su contención. En tanto, hoy se realizará la audiencia de urgencia con la patronal ante la delegación del Ministerio de Trabajo.
“Nosotros nos manejamos de dos maneras: hacemos procedimientos aislados y en este caso fue por una denuncia”, dijo.
“En el campo había una familia, con menores que estaban haciendo trabajo de alambrados. Había una criatura de unos 11 años y otros dos menores, ayudando a sus padres en los trabajos y no iban al colegio”, detalló Olmedo
Los peones no estaban registrados y todos convivían en una precaria construcción, que carecía de todo servicio. “En el lugar vivían los 7 integrantes de la familia y el hombre mayor de 73 años, que fue el que denunció”, precisó el delegado regional del gremio rural.
Por pedido de los propios obreros y la comisión de Trata de Personas de la Provincia, es que se los retiró del establecimiento y fueron trasladados a Río Cuarto.
En cuanto a la procedencia de los trabajadores se indicó que el adulto mayor es oriundo de La Toma y estaría trabajando en el campo de Alejandro desde hace unos 8 años. En tanto, la familia, con los menores, proviene del norte argentino, de un pueblo cercano a Resistencia (Chaco).
Sanciones y multas
Las actuaciones e investigaciones en torno a este hecho tienen varios caminos por desandar. Por un lado, la Fiscalía de La Carlota deberá entender sobre la denuncia de violencia hecha por el peón y la mujer.
Por otro lado, Uatre aplicará todas las multas correspondientes por irregularidades en el personal y las condiciones paupérrimas en las que vivían. “También clausuramos la casa porque estaba en condiciones deplorables”, precisó Olmedo.
Asimismo hoy, en el Ministerio de Trabajo se determinarán responsabilidades y aplicarán sanciones estipuladas por la ley laboral.
“Es lamentable la situación en la que están los trabajadores. Esperemos que en algún momento esto mejore”, finalizó el delegado en referencia a los reiterados hechos de similares características detectados en campos de la zona y durante los últimos años.
Se deberia conocer con nombre y apellido del o los responsables de tanta barbarie, una verguenza, es aberrante.