Desarrollo: El ex director del Teatro Colón, Jorge Telerman, se refirió a su desplazamiento del máximo coliseo argentino y le aconsejó a Julio Bocca, su sucesor, que “ese amor, que yo sé que tiene” por el ese escenario porteño “pueda ser transformado en gestión. Tiene un desafío muy grande”.
“Ese amor, que yo sé que tiene por el Teatro, le permita cerrar algunas heridas”, dijo Telerman. “En algún momento hubo una relación tensa en el Teatro Colón. Esa es una asignatura pendiente que, con alguien tan talentoso como él, todos esperamos que los vínculos mejoren”, agregó.
«Nunca fui integrado en la gestión de Jorge Macri. No terminó mal porque nunca empezó del todo bien”, había comentado Telerman en Radio Rivadavia, sobre su relación con el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
En diálogo con la Agencia Noticias Argentinas, el ex titular del Colón dijo que su reemplazo, el pasado 25 de agosto “fue sorpresivo porque era otra cosa lo que habíamos acordado en su momento con el jefe de Gobierno Porteño, Jorge Macri. Creo que en las instituciones como el Teatro Colón las cosas deberían trazarse con mucha más previsibilidad y de manera más ordenada”.
Con este punto de partida, Telerman destacó: «Me parece que es uno de los grandes problemas que tenemos como país, cuidamos poco las instituciones, el funcionamiento y ojalá que esto sirva para empezar a cambiar».
Consideró el proceso como «una vuelta de página» y la posibilidad de apuntar a la Ciudad de «una manera más abierta y más libre. (En CABA) es donde están mis pasiones, no sólo en el campo de la cultura, sino en general y mirando nuevos rumbos y volviendo a involucrarme en el ámbito político y económico».
Noticias Argentinas – ¿Nuevos rumbos como política partidaria?
Jorge Telerman – Como una persona que va a empezar a opinar, mirar, y hacer saber sus pensamientos y opiniones sobre esta ciudad que tanto quiero y la veo con muchas falencias que ojalá se mejoren. Espero que quienes tenemos esa pasión, participemos activamente en la reflexión sobre cómo lograr una ciudad mejor.
NA – En línea con esa mirada ¿Cómo ves la situación del país a nivel nacional y con la presidencia de Javier Milei?
JT – Creo que estamos frente al inicio de algo nuevo. Todas las entidades partidarias estallaron por el aire y no sólo en Argentina. Se están conformando nuevas identidades. Podemos ver la incomodidad que tienen todas las fuerzas políticas aún para lograr posiciones cohesionadas ante cada punto: medidas económicas, nombramientos en la corte.
Vemos que, en las fuerzas políticas una parte piensa una cosa y otra algo distinto porque estamos en un momento donde todo se configura. Es una época muy interesante y por eso quiero participar. Los poderes políticos no tienen una posición definida sobre ningún tema porque internamente hoy es casi imposible que haya una sola voz.
NA – Anteriormente comentabas que «muchas veces el arte está un paso por delante de la política ¿Cómo ves tu gestión cultural en retrospectiva? ¿Y en adelante?
JT – Frente a la nueva gestión del Teatro Colón, me pongo a disposición de las próximas autoridades a quienes les deseo lo mejor. Como fue tan abrupto e intempestivo, de aquí a fin de año, está -vigente- toda la programación que nosotros teníamos diseñada, en preparación y avanzando.
NA – ¿Qué consejo le darías a Julio Bocca?
JT – Que ese amor, que yo sé que tiene por el Teatro, le permita cerrar algunas heridas. En algún momento hubo una relación tensa en el Teatro Colón. Esa es una asignatura pendiente que, con alguien tan talentoso como él, todos esperamos que los vínculos mejoren. Que ese amor pueda ser transformado en gestión. Está en un desafío muy grande: una cosa es ser el artista genial que es, y otra es la gestión.
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