Desarrollo: Donald Trump, en su primer acto tras la renuncia de Joe Biden a la reelección, lanzó fuertes críticas contra la vicepresidenta Kamala Harris, quien se perfila como la posible candidata presidencial del Partido Demócrata. En un evento en Charlotte, Carolina del Norte, Trump la calificó de «lunática radical» y la acusó de querer «ejecutar bebés» debido a su apoyo a la interrupción voluntaria del embarazo.
Trump también afirmó que Harris es la fuerza impulsora detrás de lo que él llama «las catástrofes de Biden» y expresó su preocupación por el futuro del país bajo su liderazgo. El magnate señaló que los demócratas estaban detrás de la decisión de Biden de renunciar a la reelección, sugiriendo que Harris estaba encubriendo la «incapacidad mental» del presidente.
En respuesta, Harris ha defendido firmemente su postura sobre los derechos reproductivos, argumentando que es fundamental que las mujeres tengan el control sobre sus propios cuerpos. En un acto reciente en Wisconsin, Harris declaró que detendrán las prohibiciones extremas del aborto propuestas por Trump, subrayando la importancia de la libertad reproductiva.
El discurso de Trump también incluyó críticas a la trayectoria de Harris en política exterior e inmigración, cuestionando su capacidad para liderar el país. A medida que se acercan las elecciones, el expresidente se comprometió a derrotar a Harris, asegurando que su campaña se centrará en exponer lo que él considera sus fallos y debilidades.
La contienda electoral promete ser intensa, con Trump y Harris en el centro de la atención política. Las declaraciones de Trump reflejan su estrategia de ataque directo, mientras que Harris continúa consolidando su posición y defendiendo sus políticas frente a las críticas republicanas.
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