La localidad de Bengolea aún no sale de la consternación tras conocerse la semana pasada que en un campo de la zona, cuatro familias del norte del país habrían sido víctimas de trabajo esclavo y trata de personas. Al respecto, la Sociedad Rural de Río Cuarto emitió un comunicado repudiando el maltrato laboral y solicitando respuestas a la Justicia.
El juez federal subrogante, Sergio Pinto, quien está a cargo de la investigación y ordenó el allanamiento al establecimiento rural “La Chalita”, remarcó que “las familias se encuentran en buenas condiciones de salud y alimentación”.
“Tres familias ya fueron trasladadas, están bajo cuidados médicos, han sido asistidas, se les brindó alimento y todo lo que necesitan. Se está haciendo un trabajo muy puntilloso con ellos en Córdoba. Lo más inmediato ya fue cubierto”, manifestó el magistrado.
Precisó que la situación del productor agropecuario de apellido Ryan recién se definirá cuando declaren como testigos las familias damnificadas y se le tome indagatoria. “En principio contamos con el informe de una de las familias en donde explican la situación que vieron en el lugar y de qué se trataría, falta hablar con las otras dos familias y queda tomar la indagatoria de la persona detenida. Es de vital importancia el informe de la Subsecretaria” declaró Pinto.
El juez dijo que los trabajadores fueron engañados para traerlos a trabajar desde sus lugares de origen hasta la zona, “en principio se les habría ofrecido un tipo de trabajo y condiciones laborales que luego no fueron cumplidas”.