En la Capital Federal había hielo en las calles, localidades bonaerenses quedaron cubiertas de copos de nieve y las marcas térmicas cayeron por debajo de 0 grado.
La ola de frío polar avanzó miércoles y ayer jueves con fuerza sobre todo en el territorio nacional, con una sensación térmica por debajo de cero grado en gran parte del país, la caída de aguanieve en la ciudad de Buenos Aires y de nevadas en distintas localidades del interior bonaerense, mientras que en La Carlota se registró una mínima de un grado bajo cero.
La lluvia que cayó desde la madrugada sobre Capital Federal, durante el jueves, empezó a tomar color blanco y una consistencia mayor pasadas las 8 en la zona del Obelisco, en Constitución y distintos barrios de la Capital Federal.
A esa hora se registró el día más frío en lo que va de 2012, con 2,6 grados de temperatura y 1,5 bajo cero de sensación térmica, impulsada por viento y precipitaciones.
El raro fenómeno para la zona metropolitana se había iniciado en el conurbano, en lugares como Ezeiza, Morón y La Matanza, entre otras zonas, en forma esporádica, con las primeras luces del día.
Desde la madrugada, ya se produjo la caída de aguanieve en diversos puntos del interior de la provincia de Buenos Aires, como Saladillo, 9 de Julio, Lincoln, Pehuajó y San Miguel del Monte, según los reportes recogidos en esas ciudades.
Nieve en Tres Arroyos
En la localidad de Tres Arroyos, ubicada a unos 200 kilómetros de Bahía Blanca, se registró alrededor de las 8 hasta pasadas las 11, una intensa nevada que sorprendió a los lugareños, quienes aprovecharon para sacar fotos ante el inusual paisaje blanco.
Allí, se suspendieron las clases en algunos establecimiento educativos, hubo dificultades para circular por las calles y el manto blanco generó un paisaje distinto en la ciudad.
Advertencia
Ante la ola de frío polar que afecta al país, el ministro de Desarrollo Social bonaerense, Martín Ferré, reiteró la necesidad de extremar las medidas de prevención para evitar accidentes con monóxido de carbono como el ocurrido a una familia de Banda Norte en la ciudad de Río Cuarto.
Pidió estar atentos al funcionamiento de los calefactores y detalló que estos artefactos «deben tener la llama azul» por lo que «si la vemos amarilla, naranja o roja, automáticamente hay que apagarlos y llamar a un especialista”.
Aconsejó a la población que se calefacciona con braseros que los prenda «fuera de la casa porque es el momento de mayor combustión y los apague cuando uno se va a dormir”.
Temperaturas extremas
En el interior del país, una de las temperaturas más extremas se produjo en San Carlos de Bariloche, donde descendió a los 10 grados bajo cero, mientras que en la base Marambio, en la Antártida, llegó a una temperatura negativa de unos 45 grados.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) describió en un informe especial la situación como provocada por «una masa de aire muy frío de origen antártico» que alcanzó el centro del país y se aprestaba a alcanzar la zona norte en lo que resta de la jornada.
«Esta situación provocará durante los días jueves, viernes y sábado inclusive, bajas temperaturas en todo el país, con heladas, en algunos casos intensas, y máximas que, en algunos casos, no superarían los 10 o 12 grados», indicó el organismo.
Principio de asfixia
Una familia de Banda Norte de Río Cuarto sufrió el jueves a la mañana un principio de asfixia por inhalación de monóxido de carbono.
Rubén Alfredo Carrizo, su esposa y su hijo de 18 años amanecieron casi inconscientes, pero alcanzaron a alertar a la Policía, que debió romper la puerta de la vivienda de calle Juana de Azurduy 670 para rescatar a la familia.
El subcomisario César Martina explicó que a las 10.30 horas recibieron un llamado al 101 de alguien que dijo estar atravesando una fuerte descompostura, de la cual también advertía lo mismo en el resto de su familia.
Hasta el lugar concurrió rápidamente la Patrulla Preventiva y al no tener respuestas ante el llamado a la puerta, procedieron a romperla para poder ingresar.
En el interior encontraron al denunciante junto a su mujer, identificada como Patricia Mariel de Carrizo, de 58 años, y su hijo Matías, de 18, desvanecidos.