Es la nueva estimación que hizo la Bolsa de Cereales de Córdoba por el efecto climático. En maíz, en cambio, el recorte con respecto a la campaña récord de 2011 sería del 31%. Río Cuarto, complicado.
El nuevo cálculo de producción de soja de la campaña en curso, 2011/2012, efectuado por el Sistema de Información Agroeconómica muestra una mejora de 502.903 toneladas respecto a la estimación elaborada en enero. O sea, ha habido un efecto beneficioso de las lluvias registradas desde fines del primer mes del año. De todos modos, una cosecha de 9.093.188 toneladas a nivel provincial significa un recorte del 22,2% con relación al ciclo anterior, 2010/2011,en que Córdoba produjo 11.682.562 toneladas. El rendimiento promedio de soja terminaría ubicándose en 19,9 quintales por hectárea: en 2011, fue de 24,2 quintales.
Maíz, en derrumbe
Con relación al maíz, la segunda estimación provisoria de la Bolsa cordobesa indica que se obtendrían 5.962.000 toneladas, la caída de cosecha será entonces de un 31% en comparación a la precedente. Hace un año, Córdoba alcanzó 8.657.543 de toneladas del cereal. “El contraste se grafica igualmente con los rindes promedios: este año serán de 47 quintales contra 65 de 2011.Los valores calculados se seguirán ajustando en las próximas semanas y conforme se vaya dando el avance de cosecha”, explica el informe.
Sorgo y girasol
En lo que respecta a sorgo, la Bolsa calcula rindes que variarían entre 35 y 55 quintales por hectárea, lo que arrojaría un promedio provincial provisorio de 44,3 quintales.
Si se cumple, tomando en cuenta las 129.000 hectáreas sembradas, la producción se situaría en alrededor de 570.000 toneladas (el año pasado se cosecharon 585.139 toneladas). Finalmente, la Bolsa de Cereales de Córdoba estima una producción de girasol de 48.884 toneladas, cayendo un 24% respecto a la campaña pasada.
“Debido al fuerte estrés hídrico sufrido durante enero, se observan daños irreversibles en los cultivos estivales, en un año en que buena parte de la provincia contó con lluvias para siembras tempranas. Las perspectivas de mejora se enfocan exclusivamente a los lotes de segunda o a las siembras tardías, aunque puede verse afectado su potencial para el logro de altos rendimientos a causa de acortamiento del ciclo de desarrollo o presencia de heladas tempranas”, concluye el informe de la Bolsa de Cereales.