Pese al tiempo inestable durante estos dos días, miles de files asistieron a las Fiesta patronal de Reducción. En la jornada del primero de mayo, desde muy temprano comenzaron a llegar los peregrinos hasta los pies del Cristo de la Buena Muerte, desde distintos lugares de la región y del país.
A pesar del mal tiempo los tradicionales puestos de ventas también prepararon sus sectores donde se podía adquirir desde prendas de vestir hasta el mas sofisticado juguete electrónico, para entusiasmo de grandes y chicos. También los kioscos de venta de choripan, panchos y lo que el visitante quería saborear, se ubicaron en el sector oeste de la plaza,.
Pese al intenso frío era día fiesta en Reducción. Los fieles en largas colas que partían desde la plaza, esperaban el momento para poder llegar a los pies del Cristo de la Buena Muerte en el altar del templo. Al frente del mismo, sacerdotes, diáconos y seminaristas, ofrecían la ayuda espiritual y la información necesaria a quienes en muchos casos llegaban por primera vez.
A diferencia de otros años, la misa oficiada por el Obispo Eduardo Eliseo Martín, no se realizó en el altar ubicado en la plaza, ya que el mal tiempo y el intenso frío, hizo que la misma se oficiara en el mismo templo, allí también se instalaron las autoridades provinciales, el ministro de Carlos Gutiérrez y el intendente Jorge Graciano, además de autoridades institucionales y partidos políticos,
A las 10 am, el Obispo comenzó la celebración, en la que destaco «La fe de todos por llegarse al templo del Cristo de la Buena Muerte”, mas adelante el obispo hizo referencias en su homilía a la Beatificación del santo padre Juan Pablo Segundo para finalizar agradeciendo tanto a las autoridades provinciales como municipales, por el valioso aporte al santuario de Reducción.
Finalizada la Misa en la municipalidad, en la sala de prensa, las autoridades visitantes y locales dieron una conferencia de prensa a los medios que se encontraban acreditados para la cobertura de esta muestra de fe.
Cada hora se oficiaban misas y a las 15, 30 se realizo el Vía crucis y misa desde la plaza, hasta la ruta nacional 8, al oeste de la población, lugar donde se encuentra el Cristo de La Buena Muerte,
Recordemos que mas de 200 efectivos policiales tuvieron a su cargo la seguridad en la población. En los ingresos de la Iglesia y en la plaza se distribuyó folletería y diarios, haciendo referencia a los horarios y la alerta, especialmente en los lugares donde mas se aglomeran fieles, ante la presencia de posibles «punguistas», que siempre aprovechan la ocasión para apoderase de carteras, billeteras o algún elemento de valor.
Así comenzó la Fiesta Patronal de Reducción, la que durante tres días recibe millares de fieles que se llegan a la villa a adorar al Cristo de la Buena Muerte.