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La Carlota fue protagonista del de los sucesos que se conmemoran en el bicentenario de la argentina ya que desde 1798 la villa contó con Cabildo y en muchos acontecimientos históricos La Carlota fue testigo privilegiado, un claro ejemplo, entre tantos que se pueden citar, cuando un grupo de ingleses fueron enviados al fuerte tras ser tomados prisioneros en 1806.

Conocer su historia y sus símbolos nos acercan a nuestras raíces.

HERÁLDICA

Forma: cuadrilongo con borde inferior redondeado, cuartelado en cruz estrecha, filiera de sable, timbrado.

Trae en el primer cuartel sobre tapiz de gules una cruz de  Malta de plata.

Trae en el segundo cuartel sobre tapiz de azur un sauce foliado de sinople tronco de su color

Trae en el tercer cuartel sobre tapiz de oro el croquis de gules de una construcción.

Trae en el cuarto cuartel sobre tapiz de plata (gris) una flor de lis de oro.

Ornamentos: como timbre un sol naciente incaico con nueve rayos visibles en ángulo diedro de oro. Debajo de la punta una cinta terciada en faja de azur,  plata y sinople plegada sobre sí misma en ambos lados y extremos cortados en triángulo cargada con un lema toponímico de letras capitales romanas de sable.

SIMBOLOGÍA

La cruz de la primera división simboliza la fé cristiana de la población  y la primera capilla dedicada a Nuestra Señora de la Merced.

El  sauce representa su nombre primigenio Punta del Sauce.

El croquis del antiguo fuerte origen de la actual población se representa en la división inferior izquierda.

La flor de lis por último rememora que el 12 de abril 1792 fué elevada a Villa Real de La Carlota.

El sol naciente incaico es  además de su simbolismo un homenaje a los antiguos indígenas de la zona. La cinta inferior combina los colores patrios con el verde de su fértil llanura.

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